Trump anunció un arancel de 25% a importaciones de Canadá y México y de 10% a las de China. No obstante, finalmente postergó por un mes las medidas sobre sus vecinos; a cambio de compromisos en seguridad fronteriza y lucha contra el narcotráfico.
En cambio, los aranceles a China de 10% entraron en vigor, y el Gigante Asiático respondió con tarifas de 15% al carbón y gas natural licuado, y de 10% a productos como petróleo y maquinaria agrícola.
Esto genera efectos mixtos en los precios del caucho natural: la guerra comercial reduce la demanda global, pero la suspensión de aranceles a Norteamérica da cierto alivio al mercado. Peterson Institute for International Economics ha estimado este impacto para ambos países.
Los aranceles de Estados Unidos sobre China quitarían a este país 0,1% de su PIB a 2030. Para China, el impacto sería de 0,9%. Si se considera a su vez imposiciones de tarifas de China hacia EEUU como reacción, el crecimiento perdido es de 0,3% y 1,1% respectivamente.
Sobre todo, el último efecto impactará en la demanda de caucho natural dado la importancia de China como comprador, derivando en menores precios.
Los trabajadores de la plantación de caucho de Firestone en Liberia iniciarán una huelga el 6 de febrero de 2025, exigiendo mejoras salariales, beneficios y la
inclusión de empleados contratados en su sindicato. Firestone, con un siglo de presencia en Liberia, ha sido criticada por su trato a los trabajadores.
Aunque su producción anual se estima en 30 mil toneladas, la huelga podría generar un leve impacto alcista en los precios del caucho, dado que representa solo el 0,2% de la producción mundial.
Trump reafirmó su intención de aumentar la producción petrolera en EE.UU. y pidió a la OPEP hacer lo mismo para reducir los precios. No obstante, su poder es limitado. Las decisiones de las petroleras dependen más del mercado que del gobierno, y la OPEP ha indicado que mantendrá su estrategia sin considerar los pedidos de Trump.
Aún así, se espera una moderada sobreoferta de petróleo en 2025 debido a la débil demanda china, el aumento de producción en EE.UU. y Guyana, y posibles recortes menores de la OPEP, lo que presionaría los precios a la baja y presionando a que el caucho natural se mueva en la misma dirección.